Editorial:  (Extraida de la Revista del Centenario)

 

Varias razones incidieron en la decisión de la directiva de Talca National para encargar la publicación de una revista, la que usted tiene en sus manos. Sobresale una en especial, cual es, el centenario de vida que cumple la entidad el 28 de Septiembre de 2006.

 

Por cierto, la fecha de la magna fundación de uno de los institutos más antiguos y señeros de Talca merecía algo especial, tangible, que realzara la justa y meritoria celebración.

 

Un siglo de vida es una edad que pocas instituciones chilenas pueden alcanzar. ¿Cuánta labor y servicio al deporte pueden abarcar en 100 años de vida? ¿Cuántas generaciones han abrazado la causa albiazul que no es otra que prestar, prodigar y entregar ayuda al semejante en casos de situaciones aflictivas?

 

Casi no existen palabras para resumir o reseñar la historia en torno a una entidad que durante diez décadas ha servido al deporte y, por consiguiente, a la comunidad en general. Quizás un pequeño recuento apretujado en estas páginas disminuya en parte esa inquietud. Aún así, en la práctica es una misión imposible.

 

Respecto al presente, Talca National llega al centenario con una realización en particular, trascendental; el sueño que precisamente preocupó a sus directivos durante toda su existencia: el estadio propio.

 

Sí... Hoy puede gritar a los cuatro vientos que tiene un campo deportivo, el Estadio «Vicente Acuña Parra», quizás la obra más emblemática de todos los tiempos junto a la obtención de la sede social a mediados del siglo pasado. Ahora, el futuro puede mirarse de forma diferente.

 

Dicho logro se complementa con la impecable participación en la asociación a la cual se encuentra afiliada con una docena de categorías -menores, adultas y  seniors- con resultados siempre aceptables que hacen del «Talca» una entidad respetable y prestigiosa.

 

Títulos y figuraciones de vanguardia son una constante en el concierto del balompié local, llegando a trascender en el ámbito regional en especial en los últimos tiempos. Ello lo avala el hecho de clasificar campeón regional y nacional categoría Seniors en 1996, noventa años después de su fundación

 

Su credibilidad ha llegado a tal punto que varias empresas han establecido convenios publicitarios, logísticos y comerciales.

 

No obstante, los logros señalados no habrían sido posibles si no se hubiese realizado una efectiva labor social, uno de los esfuerzos centrales de la mesa directiva que con singular acierto colabora en el cumplimiento de la agenda.  Por ejemplo, su casa de calle Uno Oriente es un centro que acoge una y mil actividades de organizaciones locales.

 

Por otro lado, el bingo electrónico es facilitado a innumerables instituciones benéficas, acorde a los objetivos de procurar ayuda a aquellos que sufren alguna emergencia. El club ha sido una entidad que a cumplido a cabalidad con sus propósitos primigenios, de forma tal que sus integrantes han recibido sólidos valores, velando siempre por el futuro y bienestar de sus familias. En tal sentido, con orgullo puede decir que un medio centenar de sus jugadores han egresado de una carrera universitaria o de estudios superiores en la última década. Una gratificación emotiva y honrosa.

 

Así, la entidad que lleva el nombre de la ciudad y la provincia, sin duda ha contado con la ayuda del Soberano Hacedor para poder sobrevivir una vida plena de realizaciones y labores altruistas y gregarias. Como para persistir en la idea que empapó a los visionarios fundadores de la enseña albiazul aquellos días finales del mes de septiembre de 1906, hace cien años.



(Por Carlos Collado L.)